martes, 29 de julio de 2008

Jose James, Javier Limon Grupo, Chucho y Bebo Valdes

Miércoles, 16 de julio

Este año me está costando escribir este blog, porque hacerlo tan "a posteriori" hace que uno pierda fuerza, aunque eso si...gana en perspectiva.Hoy voy a intentar recordar los conciertos del miércoles 16, y empezaré por el del teatro Principal, de cantante Jose James.

Jose James, Teatro Principal.

La verdad es que esperaba mas de lo que escuché. Cuando me enteré de que iba a verlo en Vitoria, busqué su disco (solo tiene uno) y lo escuché con atención. Me pareció una propuesta muy fresca, en la que se mezclaba un poco de jazz, con algo de blues, funky y hasta algo parecido al hip hop o el rap. Muy elegante. Sin embargo en directo, no me llegó tanto. Quizas le falte algo de rodaje, y comunicar mas con el público. El concierto me dejo bastante indiferente, así como los músicos que llevaba (ahora no recuerdo sus nombres), aunque cumplieron con su labor perfectamente. Muy "light" todo, la verdad, aunque pasé un rato agradable, eso si.

Javier Limon Grupo, y Chucho y Bebo Valdes, en Polideportivo de Mendizorrotza

El concierto de la noche prometía, cuando menos, ser muy divertido. Particularmente no soy muy aficionado al jazz latino, ya que a veces con esa etiqueta se nos cuelan otras cosas demasiado "festivaleras" para mi gusto. No obstante, la cantidad de buenos músicos que figuraban en el cartel, me hacía presagiar que la noche sería musicalmente buena.Y en cierto modo, así fue. El grupo de Javier Limon estaba compuesto mayoritariamente por músicos cubanos, y ya se sabe que los cubanos llevan la música y el ritmo en la sangre. Parece que no les cueste nada tocar con alma y con corazón, y con mucha fuerza siempre (a veces...demasiada). Hicieron un repertorio muy agradable, hasta con una versión de Suspiros de España (y en el pais vasco, ahi le echaron cojones, si :-). Tocaron muchos temas del disco de Javier Limón, y nos hicieron a todos sentir los ritmos caribeños. Estuvo bien. Javier dedicó el concierto a dos amigos y personalidades del mundo de las artes que estaban entre el público: David Trueba y Ariadna Gil.Tras ellos, venía el plato fuerte de la noche: Los 2 pianistas cubanos mas famosos del panorama internacional, y además padre e hijo: Chucho y Bebo.El concierto tuvo varias partes, y unas me gustaron mas que otras. La primera parte, con el cuarteto de Chucho, fue espectacular. Yo lo había visto ya en el festival de Jazz de Málaga de hace unos años, y me impresionó. Durante los 15 o 20 minutos de este, volvió a hacerlo. Además hizo un pequeño homenaje a Ellington, cosa que todo aficionado al jazz siempre agradece. Es un pianista, como bien diría su padre después, perfecto. Parece dominar el piano en toda su extensión, y con todos los matices. Todo lo tiene bajo control, y con buen gusto. Un placer escucharlo. Lo que vino después ya me gustó algo menos. Salió a cantar la hermana de Chucho (o sea...una de las hijas de Bebo), y me desagradaba su forma de cantar. Demasiado corazón, muy en el estilo "celiacruz". Para mi sobraba, pero...claro, la cosa iba de celebración familiar.Y para culminar la noche, salió Bebo. Admirable, eso si, pero ya está muy mayor. Nada mas comenzar, tuvo alguna equivocación, que los que lo respetamos y queremos como músico, se la perdonamos, pero quizás ya va siendo momento de que se retire de los grandes eventos como este. Le tiemblan las manos mucho, vamos que ya se van notando los 90 años y la carretera que lleva este hombre sobre sus espaldas. Yo no digo que deje de tocar, porque como músico que soy, entiendo que él desee seguir tocando hasta que dejen de responderle las manos o la cabeza, o hasta que se muera si ambas cosas le aguantan hasta el final (ese tambien es mi deseo personal, así que no voy a criticarselo a los que además son infinitamente mejores músicos que yo), pero quizás los grandes festivales ya no sean el ámbito por donde deba moverse.
De todas formas, al día siguiente comentandolo con algún compañero de seminario, alguien me decía el escenario desprendía tufillo a despedida familiar. Hasta Chucho salió con su hijo pequeñito en brazos. Reconozco que fue bonito y emotivo, y me encanta que esa familia nos ofrezca esa música y ese buen ambiente. Así que, que no se me entienda mal, que ojalá Bebo pueda seguir tocando 20 años mas, por mi ... encantado.Y así termino la noche en Mendizorrotza, con el público entregado a esa escena familiar tan entrañable, y con los músicos del grupo de Javier Limón también en el escenario, en un fin de fiesta mu "sabrosón", como era de esperar. Noche divertida, sin mayor trascendencia. Pero bien, yo tengo claro que la música es para divertirse, así que muy fui a la cama también satisfecho ese día.

Puntuaciones:
Jose James: 6,5
Javier Limon Grupo: 7,5
Chucho y Bebo Valdes: 8 (aunque a Chucho con su cuarteto, le daría un 9,5 por lo menos)

martes, 22 de julio de 2008

Charles Lloyd - Wayne Shorter - Herbie Hancock

Charles Lloyd Quartet, en Teatro Principal (Martes, 15 de julio)

Al segundo concierto de abono del Teatro Principal llegué a tiempo de milagro, ya que tenía que hacer el recorrido desde el conservatorio hasta allí a pie, y además no estaba muy seguro de la ruta a seguir. Conseguir llegar a tiempo, pero algo acalorado y agobiado, así que me prometí a mi mismo que en adelante haría el recorrido tranquilamente, aunque me perdiese el primer tema de cada concierto, como así ocurrió.
El concierto de Lloyd me gustó, aunque la música que el hace no suele ser muy de mi agrado. Comenzó con un tema muy extraño, con ciertos aires orientales, y aunque después hizo cosas más normalitas. Creo recordar que hasta hizo una versión del “Rabo de nube” de Silvio Rodríguez. El pianista me gustó bastante. Charles Lloyd suele rodearse de buenos pianistas, y la prueba está en que uno de sus pianistas durante cierta época fue el mismísimo Michel Petrucciani, y creo recordar que tambien Keith Jarrett.
De todas formas, mi cabeza estaba mas en lo que iba a ver por la noche, que paso a contar.

Wayne Shorter Quartet y Herbie Hancock Quintet
La primera de abono de Mendizorrotza, y menudo cartelazo. Dos de los músicos que mas admiro iban a tocar en el mismo escenario, cada uno con su banda. Pensé que lo mismo se juntaban al final, pero eso no ocurrió.
El resultado, luces y sombras: Wayne Shorter no me gustó nada, la verdad. Demasiado denso para mi. Y eso que sobre el escenario estaban 4 grandes músicos: John Patitucci al contrabajo, creo que Brian Blade en la batería, Danilo Pérez al piano y el propio Shorter en los saxos. Esos instrumentistas, por separado, a mi siempre me han gustado. No obstante, la otra noche se dedicaron a hacer una música que, aunque no dudo que era de gran calidad técnica y emoción, escapaba a mi cortas “entendederas”. Temas muy largos, casi modales, muy complejos en las improvisaciones, con un Danilo Pérez golpeando el piano con furia (quizás también estaba mal sonorizado, porque sonaba excesivamente alto). En fin, toda una catarsis colectiva entre los 4 músicos, pero que a mi no me transmitió casi nada. Lástima.

Tras ese vendaval, llego Herbie Hancock, con una propuesta muy distinta. He oído comentarios a posteriori sobre su comercialidad, y efectivamente fue bastante comercial, pero yo no desprecio lo comercial si está hecho con calidad y buen gusto, y los temas de Hancock, casi todos de sus 2 últimos CD´s (Posibilities y The River) sonaban muy bien. Los músicos en el escenario tampoco eran principiantes, que digamos: En la batería estaba uno de los mejores del mundo, Vinnie Colaiuta. En el bajo eléctrico (si, como leéis: bajo eléctrico), Dave Holland. Sorprendente, porque Dave es normalmente contrabajista, pero esa noche en casi todos los temas tocó el eléctrico. Chris Potter en el saxo (ya lo vi con el quinteto de Holland el pasado año, y me encantó), y Lionel Lueke en la guitarra (a este reconozco que no lo conocía, y además me gustó bastante poco su aportación a la banda). También había 2 vocalistas, que cual teclas de piano…una era blanca y la otra negra. La blanca, Sonya Kitchell, era la encargada de poner voz a los temas de Joni Mitchell que eran versionados, y la negra, Amy Keys, era la que tenia la misión de poner la nota de blues. Me gustaron bastante las dos. El final pudo haber sido apoteósico si no se hubiese visto empañado por un problema técnico con el sonido. Y es que el Sr. Hancock se quiso despedir con dos de sus clásicos: “Canteloup Island” y como bis el famoso “Chameleon”. Como ya os comento, hubo un problema con el sonido durante el solo de Chris Potter, que hizo que la cosa no quedase tan redonda, pero aún así yo lo disfruté. “Canteloup” es uno de mis temas favoritos, y escucharlo directamente de su creador siempre es gratificante.
Así que el primer día acababa con buen sabor de boca, y el festival acababa de empezar.
Ah, las puntuaciones:
Charles Lloyd Quartet: 7,5
Wayne Shorter Quartet: 6
Herbie Hancock Quintet: 8

Seminario Julliard Sholl (Primera Jornada)

Martes, 15 de julio, Vitoria
Ya de vuelta en mi Almería, e intentando asimilar todo lo visto y todo lo oído, no se muy bien ni como empezar. El pasado año iba haciendo la crónica de lo sucedido día a día, pero este año me ha sido totalmente imposible. Mi agenda era tan ajustada, que cuando llegaba la noche lo único que deseaba era acostarme, descansar y quizás soñar un poco con todo lo vivido ese día, y despertarme para iniciar una nueva jornada con la misma ilusión que la anterior. No había tiempo para mas.
Digo esto para que los que tengáis la paciencia de leerme, me perdonéis la inexactitudes que seguro tendré, debido al paso de los días, sobre todo en cuestión de nombre de temas y de músicos, que no he tenido la precaución de anotar, y que el paso de los días me habrán hecho olvidar.
Bueno, sin mas dilación, no sea que olvide mas cosas, paso a contar lo sucedido:

Seminario de la Julliard, por la mañana
La mañana del martes acudí a la primera jornada del Seminario de Jazz de la Julliard School. Ya bastante mas tranquilo, debido a que en la prueba del día anterior, una pequeña audición ante el profesorado, salí medianamente airoso, como ya comenté.
Esa mañana ya en el vestíbulo del conservatorio tuve la oportunidad de charlar con los primeros compañeros de seminario que llegaron por allí, algunos de los cuales con el transcurso de los días han acabado siendo compañeros…y amigos, que es lo importante. Allí estaba Rafa, un chico saxofonista (aunque profesionalmente es bombero en Vitoria) con el que conecté de inmediato. También ya estaba por allí Adrián, un joven pianista de Miranda del Ebro, con el que he tenido la suerte de compartir muchos momentos fenomenales de la semana, incluidos algunos ratos tocando a 2 pianos él y yo, cosa que ninguno de los dos habíamos hecho hasta ahora. Un gran compañero y creo que a partir de ahora un gran amigo, y del que estoy seguro se oirá hablar en el futuro jazzistico de nuestro país, porque tiene mucho swing y mucha inventiva y, lo que es mejor, mucha humildad.
También estaban por allí una pianista de Bilbao, que no recuerdo su nombre, aunque hemos hablado bastante durante la semana. Y poco a poco iban apareciendo mas músicos, todos con cara de despistados, pero igual de ansiosos por comenzar.
Y menuda forma de comenzar: nos pasaron a todos al auditorio del centro, y allí estaba todo el cuadro de profesores de la Julliard: Carl Allen, que ha sido el director del seminario, un grandioso batería, Ran Blake como saxofonista, Rodney Jones con su guitarra, el fabuloso trompetista Terell Stafford. Ah…y no se me olvida…mi admiradísimo Benny Green, el hombre del piano (PIANO, con mayúsculas). Les acompañaban algunos “alumnos” aventajados de la Julliard (lo pongo entrecomillado, porque eran ya bastante “maestros”), que han estado también enseñando toda la semana codo a codo con ellos.
Mención especial al equipo de traductores. Todos los profesores hablaban siempre en ingles (alguna frasecita en castellano, pero meramente anecdótica), pero ahí estaban siempre los traductores, ayudándonos a comprender la gran cantidad de información y sobre todo de sabiduría que nos estaban transmitiendo en todo momento. Mención especial para Say Chi, la joven traductora china (bueno, de Malasia) que estuvo siempre traduciéndonos al bueno de Benny, y con la que pasamos casi todas las tardes. Además de buena traductora, es también pianista y estaba allí con un gran interés por aprender ella misma, de forma que hacía su trabajo todavía con mas cariño. Una gran profesional. Bueno, todos lo eran, la verdad.
Como os contaba (que me voy por las ramas), entramos al auditorio y…como presentación y buen desayuno, nos hicieron un par de temas (lástima que ahora no recuerde los títulos) que nos dejaron con la boca abierta. Nos estaban mostrando lo que eran capaces de hacer, pero sin florituras, solo con buen gusto, con swing, para que nuestros oídos se abriesen desde el principio, y nuestros corazones comenzasen a sentir el pulso del jazz mas puro…el tempo que tanto nos iban a inculcar durante toda la semana.
Tras el “mini concierto”, nos repartieron nuestros horarios y distribución por clases, y combos. A mi me decepcionó en principio estar incluido en un combo en el que solo estábamos 5 pianistas. Pero, cuando vi que el director de ese combo era precisamente Benny Green, la cosa cambió, ya que así iba a tener la oportunidad de pasar muchas horas con uno de mis pianistas favoritos. Ya tendré oportunidad en otros seminarios de formar parte de combos mas “standard”, pero poder estar con Benny tanto tiempo os garantizo que ha merecido la pena por encima de todo.

De inmediato teníamos nuestra primera clase de “Dominio del instrumento”, y en mi caso, al ser pianista, también era con Benny. Eso si, éramos muchos pianistas, más de lo que viene siendo habitual. Unos 14 (entre activos y oyentes), de forma que las clases de dominio no pudieron ser muy prácticas. De todas formas, Benny Green ha dedicado mas tiempo en la semana a hablarnos, intentado inculcarnos muchos principios básicos para desarrollarnos en el jazz y hasta en la vida. Todo un filosofo es el bueno de Benny, con una mirada tan limpia que a veces hasta asustaba, y con una gran humanidad. Cualquier excusa era buena para abrazarnos a cualquiera de los alumnos, e intentar transmitirnos su energía. Se notaba que disfrutaba con lo que hacía, y que intentaba siempre transmitirnos esa felicidad.

También esa mañana tuvimos nuestra primera audición. Todos los profesores llevaban su propio iPod, llenito de música, y seleccionaban temas que les resultaban interesantes, para después comentarlos con nosotros. Muy enriquecedoras las audiciones, y reconozco que tengo una larga lista de CD´s que volver a escuchar, y otros que tengo que conseguir para oírlos por primera vez, gracias a las listas que nos han ido dando cada día.

Tras la jornada matinal, con una escasa hora y media para comer, incluido el tiempo para ir y volver, a las 3 y media teníamos nuestra primera tarde en el combo.
No podría contar aquí lo que allí ocurría, porque me llevaría líneas y líneas, y además no sería capaz de transmitirlo bien. Solo decir que Benny Green rezumaba música por los cuatro costados, y que nos habló mucho y toco poco, pero lo suficiente para demostrarnos por donde va el camino. También nosotros tocábamos, y nos corregía pacientemente, pero con firmeza. Hasta que no salía correctamente lo que el nos pedía, no cejaba en su empeño. Muy pendiente siempre de las melodías, de hecho el se declara un firme defensor de la melodía en estado puro: hay que aprenderse muy bien las melodías de cuantos más temas mejor. Y muy importante también el tempo. El metrónomo siempre nos acompañaba.
En nuestras primeras horas de combo, comenzamos a intentar seleccionar que temas prepararíamos para el concierto de fin de seminario, y ese sería nuestro objetivo el resto de días.
Ya iré contando mas cosas sobre nuestras tardes con Benny, conforme me vaya acordando, pero esa tarde continuó con los conciertos del festival, así que voy a ello en la siguiente entrada.

lunes, 14 de julio de 2008

Jean Marie Ecay Trio + Rick Margitza

Muy bueno el comienzo del festival. Yo había escuchado a este guitarrista por un disco suyo llamado "Atlantic Blues", y pensaba que era básicamente un bluesman, pero nada mas lejos. Hoy me ha demostrado en el escenario del Teatro Principal que es un guitarrista de lo mas completo.


Jazz con un aire muy moderno, con tintes coltranianos a ratos, sobre todo a partir de la entrada del saxofonista invitado, con algo de blues en ciertos momentos pero sin abusar, con un Jean Marie combinando varias guitarras (eléctrica, acústica y una "silent" guitar como la de mi amigo Antonio Gómez), y tocando con todas con igual maestría y sensibilidad. Respaldado por una sección rítmica muy sólida compuesta por Jean Michel Charbonnel al contrabajo y Andre Charlier en la batería. Han tocado un par de temas en trio (creo que ambos eran composiciones del propio Ecay) e inmediatamente ha entrado en el escenario el fabuloso saxofonista Rick Margitza.



Ya en formación de cuarteto han ofrecido un concierto soberbio, una muy buena forma de que los aficionados que estábamos allí, y el teatro estaba bastante lleno, nos preparemos para la semana tan intensa que nos espera.



Los temas en su mayoría eran composiciones de los propios músicos, con alguno del contrabajista Charbonnel, y otro de Margitza llamado (si no recuerdo mal) Street of thiefs. Jean Marie nos ha obsequiado con una preciosa balada compuesta por el para un cantante francés (Jean Marie reside en París al parecer, aunque habla un perfecto castellano) y de la cual había preparado una versión instrumental para la ocasión. También el segundo tema fue un estreno para este festival, con una composición que había realizado recientemente ya pensando en este trio y que tocó de una forma deliciosa con su guitarra acústica.


La verdad es que conforme voy repitiendo a este festival, mas me gustan las actuaciones de la tarde, las llamadas "Jazz del siglo XXI", en contraposición al festival mas mediatico de la noche, que también está muy bien, pero en el que normalmente no sorprende nada. Hoy he salido sorprendido por descubrir a un fantástico guitarrista y a un increible saxofonista (Rick creo que tocó en algún disco de Miles Davis, así que parece que no lo he descubierto yo)


Para despedirse, en el bis nos han regalado un "Turnaround" de Ornette que "quitaba el sentío", que me ha recordado muchisimo a aquella versión que sonaba en el ya clásico "80 81" de Metheny, con el añorado Michael Brecker en el saxo. En fin, una gozada de concierto.


Acabo de recordar que el año pasado daba puntuación a los conciertos, así que este año...siguiendo con una tradición instaurada por mi mismo, lo voy a repetir, y a este le voy a dar un...8,5, y creo que me quedo corto.

Mañana me espera uno de los dias fuertes para mi gusto del festival: todo el dia en el seminario, por la tarde el cuarteto de Charles Lloyd y por la noche el cuarteto de Wayne Shorter y Herbie Hancock con su grupo, tocando temas de Joni Mitchel. Ahi es na!!!!. No se como acabaré.

P.D.: Perdón por las fotos, pero están tomadas con mi movil y ademas a escondidas (las normas del teatro son muy estrictas y no dejan sacar fotos con tranquilidad).



Prueba de nivel en el seminario de la Julliard School

Que nervios!!!! Despues de varios años ya tocando en directo con bastante asiduidad, pensaba que estaba acostumbrado pero esta mañana...cuando me levanté tenia esas mariposillas por el estomago que suelen revolotear cuando uno se enfrenta a algo nuevo y desconocido en esto de la música.

Y para mi eso era ir al Conservatorio Jesus Guridi, de Vitoria, y pasar el trabo de tocar para la seleccion de niveles del seminario de jazz al que me he matriculado.

Menos mal que el ambiente ha sido estupendo desde la llegada. La chica que organiza todo, Amaia, es un encanto y los músicos con los que he coincidido esta mañana eran gente muy maja.

Asi que, cuando un flautista de Bilbao, Alfredo, y yo nos hemos retirado a un aula, para dar un repasito al tema que teniamos que tocar ("blue bossa"), ya estabamos algo mas tranquilos (él me reconocia despues que, aún siendo profesor de música y habiendo pasado por muchas pruebas de este tipo en conservatorios, tambien estaba algo nerviosillo).

Cuando hemos subido al escenario del auditorio, y hemos visto abajo a los 5 o 6 profesores de la Julliard (entre ellos, mi admirado Benny Green), que se han puesto a hablarnos en un perfecto inglés (menos mal que hay traductores), las mariposillas han vuelto durante unos instantes. Casi me recordaba a aquella serie de mi adolescencia: Fama, os acordais?. Los de mi edad, seguro que si.

Despues nos hemos soltado, y hemos tocado el tema que nos pedian, con su melodia, y un par de coros para improvisacion (un coro cada uno), y tras ese, nos han pedido que hiciesemos el "C-Jam blues" de Ellington. Menos mal que era facil, y tanto el flautista como yo, hemos salido airosos (o eso pensamos). Nos han citado para mañana a las 10, asi que...tan mal no hemos debido de hacerlo.

De forma que he salido contento, y con un monton de documentación que nos han dado, mas la acreditación para moverte por alli.

Todo muy bien organizado, los profesores y el personal muy amables, asi que se presenta una semana muy agradable, en la que espero aprender, divertirme y hacer muchos amigos, por ese orden.

Esta tarde...el primer concierto del cartel: Jean Marie Ecay Trio y Rick Margetiza. Ya os contaré.

Comienza el festival

Hola a todos mis pacientes lectores (si es que hay alguno):

Nuevo año y nueva edición del Festival de Jazz de Vitoria-Gasteiz, y aqui estoy, "al pie del cañon", dispuesto a contar lo que vea, y sobre todo...lo que escuche.

Este año voy a disponer de poco tiempo para escribir (suerte para vosotros) porque a partir de mañana comienza tambien el seminario de jazz, y he tenido el atrevimiento de matricularme. Ya veremos lo que tardan en echarme, aunque yo intentaré resistir. Como profesor de piano voy a tener al mismisimo Benny Green, así que cuando ponga mis dedos en las teclas, con semejante "monstruo" del piano supervisandome, me van castañetear todos los dientes. En fin, espero ser capaz de aprender algo, que falta me hace, y sobre todo divertirme y hacer amistades musicales, ya que por aqui supongo que coincidiremos gentes de toda España, e incluso algún "guiri" se apuntará.

Como el seminario va desde las 10 de la mañana hasta las 1 y media, y de 15:30 a 17:30, por las tardes, y ademas tengo abono para los conciertos de las 18:00 horas, y para los de Mendizorrotza, a las 21:00, de milagro va a ser que tenga tiempo para comer (asi adelgazo, que nunca viene mal).

Hoy tengo el dia mas relajado, y solo tengo que ir al conservatorio dentro de un rato para la prueba de nivel (glups) que hacen a los alumnos, supongo que para hacer grupos homogéneos, y por la tarde tengo el primer concierto de abono del Teatro Principal, con el trio de Jean Marie Ecay y el saxofonista Rick Margitza, asi que si mañana madrugo, intentaré escribir mis impresiones sobre ambas actividades.

Un saludo a todos los que lean esto, donde quiera que estén.

Ramon